América Móvil trabaja en conjunto con la GSMA implementando la campaña Nos Importa, que va de la mano con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
La industria móvil tiene como meta conectar a los no conectados en América Latina y el Caribe mediante la colaboración entre operadores y gobiernos. El programa Inclusión Digital de la GSMA apoya a la industria móvil y a la campaña Nos Importa para aumentar la adopción de internet, luchando contra cuatro barreras: cobertura, asequibilidad, aptitudes digitales y contenido local relevante.
Los operadores móviles juegan un papel clave en la protección de niños online, trabajando con gobiernos, policía, sociedad civil y líneas de ayuda. La GSMA y sus miembros en América Latina liderarán el debate sobre cómo proteger a los jóvenes online y crear un ambiento seguro para los niños que utilizan los servicios móviles.
Pese a la falta de legislación específica y de gestión adecuada, la industria móvil de América Latina realiza campañas e iniciativas voluntarias de gestión de desechos electrónicos dentro de sus programas de responsabilidad social empresarial. Los operadores móviles regionales desarrollan planes de logística inversa para la recogida, el almacenaje, la clasificación y la eliminación de estos desechos, al tiempo que invierten en programas y plantas de reciclaje, realizan actividades de reforestación y lideran campañas de concientización.
Las redes móviles y la conectividad que brindan pueden ser un salvavidas para los afectados por un desastre natural u otra emergencia humanitaria. Facilitan el acceso a la información y coordinan la ayuda, tanto en las poblaciones afectadas como entre los gobiernos, las ONG y la comunidad humanitaria internacional. Los operadores móviles trabajan con gobiernos y agencias de ayuda humanitaria para encontrar la forma más eficaz de colaborar y mejorar la preparación y la resiliencia de las redes ante desastres naturales.
Los operadores móviles buscan brindar herramientas de protección a los usuarios en toda la región. Trabajando con reguladores y gobiernos, realizan campañas de concientización sobre el uso seguro de los servicios móviles y facilitan el contacto con instituciones o canales de ayuda que asesoran en cuestiones de seguridad ciudadana.
El robo de teléfonos móviles se ha disparado en América Latina debido a la rápida adopción de estos dispositivos. Los sectores público y privado trabajan juntos para evitar la activación de los dispositivos robados, frenando así el mercado negro y la delincuencia. La lucha efectiva contra el robo de terminales requiere la actuación coordinada de usuarios, operadores, reguladores y fabricantes.
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